A los 22 años de que estas siamesas nacieran, dieron una gran noticia

Las siamesas Abby y Brittany Hensel capturaron los titulares por una buena razón en 1990. Un nacimiento increíble y desafiante seguramente será noticia. Después de todo, muy pocos bebés así sobreviven tanto a la gestación como al parto. Pero 22 años después, hicieron un anuncio que sorprendió al mundo.

A medida que avanzaban las vidas de Brittany y Abby, las gemelas continuaron cautivando al público de todo el país al contarles la vida que acompañaban a su condición. Y más de dos décadas después de su nacimiento, esta asombrosa noticia ha vuelto a poner a las hermanas en el centro de atención.

Abby y Brittany Hensel llegaron al mundo el 7 de marzo de 1990 en el condado de Carver, Minnesota. Y cuando nacieron las hermanas, los médicos descubrieron que estaban unidas de una manera increíblemente rara. Se les conoce como gemelos parápagos dicefálicos, lo que significa que si bien sus cuerpos están unidos, cada una tiene una cabeza.

Junto con la tasa de supervivencia extremadamente baja de siameses, su mera aparición también es rara. Aparentemente, esto aparece en aproximadamente uno de cada 189.000 bebés. Y de esa pequeña población, solo el 11 por ciento son gemelos parápagos dicefálicos. Así que la probabilidad de que Abby y Brittany realmente nacieran era mínima.

El funcionamiento interno de la anatomía de Brittany y Abby también es asombroso. La parte superior de su cuerpo, por ejemplo, contiene órganos separados para cada gemela, lo que significa que tienen un par de estómagos, dos corazones y cuatro pulmones. Al mismo tiempo, la pareja comparte la mitad inferior de su cuerpo, por lo que juntas poseen un solo sistema reproductivo, un intestino grueso y un hígado compartido.