Una reconstrucción digital del rostro de Rafael resuelve un misterio centenario sobre su identidad

Este grupo estaba formado por miembros de varias instituciones augustas de Italia. Algunos tenían su sede en la Universidad Tor Vergata de Roma, mientras que otros trabajaban en la Accademia Raffaello y la Fundación Vigamus, ambas con sede en la ciudad de Urbino.

Independientemente de sus diferentes orígenes, estas personas estaban unidas en su fascinación por la figura icónica de Rafael. Y eso no es una sorpresa, dada la alta consideración que le tienen los círculos artísticos. Las obras de Rafael en el Vaticano y sus madonas son veneradas en todo el mundo, y eso sin mencionar sus autorretratos.

Las pinturas de Rafael nos han dado una idea de cómo podría haber sido en la vida real. Pero ahora también tenemos acceso a tecnologías increíbles que pueden decirnos aún más sobre el hombre. Y como descubrieron los investigadores de Italia, a veces no se puede confiar en la visión que un genio tiene de sí mismo.

Rafael vino al mundo en Urbino en 1483. Sus padres fueron Magia di Battista Ciarla y Giovanni Santi, pero el primero falleció cuatro años después. El padre de Rafael vivió durante algún tiempo y crió a su hijo en un ambiente de creatividad. Santi era un artista, aunque a diferencia de su hijo, parece que nunca produjo nada particularmente especial.